Proclamando la verdad de la Palabra
2Corintios 4:1 Dios es bueno y nos permite servirle. Por eso no nos desanimamos. (2) No sentimos vergüenza de nada, ni hacemos nada a escondidas. No tratamos de engañar a la gente ni cambiamos el mensaje de Dios. Al contrario, Dios es testigo de que decimos sólo la verdad. Por eso, todos pueden confiar en nosotros. (3) Los únicos que no pueden entender la buena noticia que anunciamos son los que no se salvarán. (4) La buena noticia nos habla de la grandeza de Cristo, y Cristo a su vez nos muestra la grandeza de Dios. Ese mensaje brilla como la luz; pero los que no creen no pueden verla, porque Satanás (en la versión R-V dice el dios de este siglo) no los deja. (5) Y nosotros no nos anunciamos a nosotros mismos. Al contrario, anunciamos que Jesucristo es nuestro Señor, y que nosotros somos servidores de ustedes porque somos seguidores de Jesucristo. (6) Cuando Dios creó el mundo, dijo: «Que brille la luz donde ahora hay oscuridad». Y cuando nos permitió entender la buena noticia, también iluminó nuestro entendimiento, para que por medio de Cristo conociéramos su grandeza.(7) Cuando Dios nos dio la buena noticia, puso, por así decirlo, un tesoro en una frágil vasija de barro. Así, cuando anunciamos la buena noticia, la gente sabe que el poder de ese mensaje viene de Dios y no de nosotros, que somos tan frágiles como el barro.
2Corintios 4:13 La
Biblia dice: «Yo confié en Dios, y por eso hablé. (Salmos 116:10)» Pues nosotros también confiamos en Dios,
y por eso anunciamos la buena noticia.
No
hay para mí mayor alegría que saber que mis hijos viven de acuerdo con la
verdad. 3Juan capítulo 1 verso 4 (Dios habla hoy)
Cuando
fuimos convencidos del pecado y tomamos la decisión de aceptar a Cristo como
nuestro salvador y Señor nos pusimos también a su servicio, aprendimos sobre la
verdad y fue esa verdad la que nos hizo libres.
Juan 8:31
Entonces Jesús dijo a los judíos que habían creído en él: Si ustedes permanecen
en mi palabra, serán verdaderamente mis discípulos; (32) y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres. (R-V
contemporánea)
La
verdad es una, aunque se alcen voces manifestando que es anticuada, aunque se
levanten predicadores anunciando un nuevo evangelio revelado para este siglo,
aunque la mentira se manifieste con poder sobrenatural y los milagros sucedan
de a millares, aunque se predique la prosperidad financiera a los desesperados,
y los mendigos se conviertan en empresarios de la noche a la mañana, aunque
multitudes se reúnan en sus templos y digan ¡Aquí verdaderamente está Dios! El
fin de todos ellos, es la muerte.
Filipenses 3: 16
Pero en aquello a que hemos llegado, sigamos una misma regla, sintamos una
misma cosa. (17) Hermanos, sed
imitadores de mí, y mirad a los que así se conducen según el ejemplo que tenéis
en nosotros. (18) Porque por ahí
andan muchos, de los cuales os dije muchas veces, y aun ahora lo digo llorando,
que son enemigos de la cruz de Cristo; (19) el fin de los cuales
será perdición, cuyo dios es el vientre, y cuya gloria es su vergüenza; que
sólo piensan en lo terrenal. (R-V)
1Timoteo 6:3
Si alguien enseña algo que no va de acuerdo con las enseñanzas de nuestro Señor
Jesucristo, ni con la verdadera religión cristiana, (4) es un orgulloso que no sabe nada, y que
tiene la mala costumbre de discutir sobre el significado de ciertas palabras.
Con esto sólo causa envidias, enojos, insultos, desconfianza (5) y peleas en todo momento. Los que hacen
eso no son capaces de pensar bien ni conocen la verdad; piensan que, por medio
de la religión, pueden ganar mucho dinero. (6) Por supuesto, la religión cristiana hace que nuestra vida sea mucho
mejor, pero sólo cuando uno está contento con lo que tiene. (7) Porque, cuando nacimos no trajimos nada al
mundo, y cuando muramos tampoco podremos llevarnos nada. (8) Así que debemos estar contentos de que
tenemos ropa y comida. (9) Pero los
que sólo piensan en ser ricos caen en las trampas de Satanás. Son tentados a
hacer cosas tontas y perjudiciales, que terminan por destruirlos totalmente. (10) Porque todos los males comienzan cuando
sólo se piensa en el dinero. Por el deseo de amontonarlo, muchos se olvidaron
de obedecer a Dios y acabaron por tener muchos problemas y sufrimientos.
Cuando Satanás se viste
de pastor
Muchos
tienen en poco la astucia de Satanás a la hora de engañar a los incautos, él no
se anda con vueltas, el mismo Pablo dijo de él (2Corintios 4:4) que
era el dios de este siglo, y su intención no es otra que la de buscar a quien
devorar, como lo afirmara Pedro. (1Pedro 5:8) El diablo, así como un
ladrón, viene para hurtar, matar y destruir, (Juan 10:10) buscará siervos
que le sean útiles entre los hombres y los preparará para atender sus negocios.
Siervos que en el pasado se hicieron pasar por predicadores de la palabra, procurando
pervertir el verdadero mensaje transmitido por los discípulos de Cristo.
Aunque
el siguiente verso corresponde a la defensa de Pablo a las críticas sobre su
ministerio, nos señala lo sencillo que resultaba para algunos el oír y tolerar
el engaño.
2Corintios 11:4 Porque
si alguno llega predicando a un Jesús diferente del que les hemos predicado, o
si ustedes reciben a otro espíritu diferente del que han recibido, u otro
evangelio diferente del que han aceptado, ustedes lo toleran bien. (R-V contemporánea.)
Hoy
los encontramos abriendo iglesias y pregonando: (Mateo 24:23 y 24) ¡Miren, aquí está Jesucristo! Vengan y vean con
sus propios ojos los prodigios y milagros que realiza; y muchos de los que
alguna vez anduvieron en la verdad, van en pos de ellos.
2Corintios 11:13
Porque ellos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos que se disfrazan de
apóstoles de Cristo. (14) Y esto no debe sorprendernos, porque hasta
Satanás mismo se disfraza de ángel de luz. (15) Así que, tampoco es una
sorpresa que sus ministros se disfracen de administradores de justicia, pero
como sus obras será su fin. (R-V contemporánea)
Quien
lo ve desde afuera y con ojos seculares o incrédulos, lo ve como un negocio, y
es cierto, han convertido a la fe en un gran negocio que mueve imposibles sumas
de dinero; el verdadero cristiano va más allá, ve esas miles y miles de almas
que se pierden al ritmo de afirmaciones repetidas y sacadas de contexto de la
misma palabra de Dios, con fábulas absurdas, con ritos herejes y sin fundamento
bíblico, con literatura doctrinal e interpretaciones bíblicas con las que sustentar
sus actividades.
Es
increíble ver con cuanta habilidad el hombre encuentra tantos caminos fáciles y
poco comprometidos a lo largo de su vida; lo asombroso es que esa falta de
esfuerzo la utilice también para lo trascendente. Dios es el claro ejemplo de
lo que intento decir, no creo equivocarme si digo que Dios se ha cruzado muchas
veces en la vida de cualquier individuo, a nosotros nos ha sucedido antes de la
conversión. Oportunidades nos ha dado y demasiadas para conocerlo y respondemos
“otro día” y ese día se despliega en muchos otros días; pero sucede que es el
Señor quien dispone del tiempo del hombre, y puede, en el entretanto, anticiparse
la muerte a nuestros propios designios.
Santiago 4:13
Escúchenme, ustedes, los que dicen: «Hoy o mañana iremos a la ciudad; allí nos
quedaremos todo un año, y haremos buenos negocios y ganaremos mucho dinero.» (14) ¿Cómo pueden hablar así, cuando ni
siquiera saben lo que les va a suceder mañana? Su vida es como la niebla:
aparece por un poco de tiempo, y luego desaparece.
Actuamos
como necios, creemos disponer de nuestras vidas sin entender que nunca nos ha
pertenecido, tiene dos Señores, uno es la muerte como consecuencia del pecado,
el otro Señor es Cristo, quien nos la compró a un precio muy alto; el de su
preciosa sangre derramada, y hasta la muerte, en la cruz. Solamente así el
poder de la muerte deja de tener señorío sobre nosotros.
1Corintios 7:23
Por
precio fuisteis comprados; no os hagáis esclavos de los hombres. (R-V)
Hebreos 2:15
Con
su muerte, Jesús dio libertad a los que se pasaban la vida con miedo a la
muerte.
2Timoteo 1:10
Dios
nos mostró ese gran amor por medio de lo que Jesucristo nuestro Salvador hizo
por nosotros. Porque él destruyó a la muerte y, por medio de la buena noticia (evangelio), nos ha dado la vida eterna.
Crecemos
y nuestra juventud pasa a ser una serie de anécdotas con la que aburrimos a
nuestros hijos, y Dios, con Santa paciencia, sigue esperando la respuesta a la
llamada que nos hiciera durante esa juventud perdida; pero vivir lejos de Dios nos
asegura una vida sin obligaciones ni compromisos, Él puede, todavía, seguir
esperando un poco más. Viejos ya, llorando por lo que fuimos y añorando lo que
no llegamos a ser, pensamos en la muerte como una realidad al alcance de la
mano si estiramos más de lo debido el brazo, y entre los intervalos de lucida
razón recordamos de alguien que quiso muchas veces entrar en nuestra vida, y
decidimos que ya es tarde para nosotros, que ya se ha de haber ido cansado de
esperar, entonces morimos en paz con nuestra propia e insensata arrogancia.
Quizá
el lector crea que me he dispersado un poco del tema del título (suele ser algo
muy común que me suceda así. Así como a veces suelo pensar, otras viajo por
sendas que me llevan a un laberinto de reflexiones que ni yo recuerdo como han
comenzado; pero esta vez creo que no es el caso).
Eclesiastés 9:3 Este mal hay entre todo lo que se hace debajo del sol, que un mismo
suceso acontece a todos, y también que el corazón de los hijos de los hombres
está lleno de mal y de insensatez en su corazón durante su vida; y después de
esto se van a los muertos. (Al cementerio) (R-V)
Morir,
es un hecho que a todos ha de suceder, y hasta el día que el Señor regrese; a
este acontecimiento podemos esperarlo con miedo, con esperanza o con verdadero
gozo, como dijera Pablo, para mí el vivir es Cristo y el morir es
ganancia. (Filipenses 1:21)
Nada
puede impedir al hombre no creer, es una decisión personal y por lo tanto es
libre de escogerla, pero es su voluntad y como se dice; muere en su ley.
Morir
con miedo a morir debe ser algo terrible para cualquier individuo, esa muerte
llega porque Dios nos ha hecho conscientes de lo que está bien y lo que está
mal y quién más que nosotros conocemos nuestros actos durante el tiempo que se
nos dio a vivir, Pablo lo ha enseñado de la siguiente manera:
Romanos
2:14 Porque cuando los paganos, que no tienen ley, hacen por naturaleza lo
que la ley demanda, son ley para sí mismos, aunque no tengan la ley; (15)
y de esa manera demuestran que llevan la ley escrita en su corazón, pues su
propia conciencia da testimonio, y sus propios razonamientos los acusarán o
defenderán (16) en el día en que
Dios juzgará por medio de Jesucristo los secretos de los hombres, conforme a mi
evangelio. (R-V contemporánea)
Pero
existe una manera más terrible de morir, y resulta de creer que se ha vivido de
acuerdo a Dios y descubrir que la elección había sido la equivocada, por creer
que todos los caminos conducen a Él, por no ocuparse de escudriñar las
Escrituras y conformarse con las fábulas y los ritos de los que voluntariamente
participaron, conducidos por tantas promesas mentirosas (aunque dieran resultado)
de prosperidad económica o por ser parte de los privilegiados que irán al
encuentro del señor, montados en una enorme nave espacial que habrá de llegar
de un lejano planeta de otra galaxia, y conducida por ángeles, momentos antes
de su segunda venida o por seguir a nefastos personajes que un buen día
decidieron ser iluminados mesías o sus grandes ungidos, o por oír a los que profetizan
el fin de los tiempos cada año y desde el día que pretendieron tener el poder para
entrar dentro de los pensamientos de Dios, aún cuando ni el Hijo sabe ni el día
ni la hora.
Marcos 13:32 Nadie
sabe el día ni la hora en que yo vendré; no lo saben ni siquiera los ángeles
del cielo. Es más, ni yo lo sé. Dios es el único que lo sabe.
Mateo 7:21 No todo el que me dice: Señor, Señor,
entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que
está en los cielos. (22)
Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en
tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? (23) Y entonces les declararé: Nunca os conocí;
apartaos de mí, hacedores de maldad. (R-V)
Lucas 13:22 Pasaba Jesús por
ciudades y aldeas, enseñando, y encaminándose a Jerusalén. (23) Y alguien le dijo: Señor, ¿son pocos los
que se salvan? Y él les dijo: (24)
Esforzaos a entrar por la puerta angosta; porque os digo que muchos procurarán
entrar, y no podrán. (25) Después
que el padre de familia se haya levantado y cerrado la puerta, y estando fuera
empecéis a llamar a la puerta, diciendo: Señor, Señor, ábrenos, él respondiendo
os dirá: No sé de dónde sois. (26)
Entonces comenzaréis a decir: Delante de ti hemos comido y bebido, y en
nuestras plazas enseñaste. (27) Pero os dirá: Os digo que no sé de dónde
sois; apartaos de mí todos vosotros, hacedores de maldad. (28) Allí será el llanto y el crujir de
dientes, cuando veáis a Abraham, a Isaac, a Jacob y a todos los profetas en el
reino de Dios, y vosotros estéis excluidos. (29) Porque vendrán del oriente y del occidente, del norte y del sur, y se
sentarán a la mesa en el reino de Dios. (30) Y he aquí, hay postreros que serán primeros, y primeros que serán
postreros. (R-V)
Satanás
puede vestirse de traje y decirse pastor del gran rebaño, tomar el nombre de
apóstol, ungido, obispo, sacerdote o profeta, pero Dios no nos dejará
indefensos frente a la posibilidad de ser engañados, nos ha dado suficientes recursos
como para advertir donde están puestas las trampas; si permanecemos en el
engaño es por que únicamente nos acercamos por los panes y los peces. Dios es
más grande que el tendero que ofrecen estos mentirosos en todas sus
sucursales.
Juan 5:39 Ustedes
escudriñan las Escrituras, porque les parece que en ellas tienen la vida
eterna; ¡y son ellas las que dan testimonio de mí! (R-V contemporánea)
De
esta verdad nos da testimonio la Biblia, y si está escrito; ¿No será para que lo
leamos hasta que lo aprendamos tan bien como a nuestro nombre? Esa debería ser nuestra
vocación.
Clara
es la palabra cuando nos dice que debemos probar los espíritus y sin importar
quien sea el mensajero; a Pablo y Silas les sucedió esto, y ellos no hicieron
un escándalo porque así ocurriera.
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Escudriñando cada día las Escrituras para ver si estas cosas eran así |
Hechos 17:10
Inmediatamente,
los hermanos enviaron de noche a Pablo y a Silas hasta Berea. Y ellos, habiendo
llegado, entraron en la sinagoga de los judíos. (11) Y éstos eran más nobles que
los que estaban en Tesalónica, pues recibieron la palabra con toda solicitud, escudriñando
cada día las Escrituras para ver si estas cosas eran así. (R-V)
Podemos
voluntariamente ignorar la verdad, lo que no podemos hacer, es cambiarla; la
palabra de Dios es clara en esto: Mateo 5:18 Porque de cierto os digo que hasta que
pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta
que todo se haya cumplido. (R-V)
Próxima entrega: Para que la palabra del
Señor corra y sea glorificada
Que Dios los siga bendiciendo.
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